Lunes, 28 Noviembre 2022 08:07

El agujero negro Argentino

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El concepto de agujero negro espacial es muy complejo. Leyendo un par de horas uno apenas puede llegar a comprender que se trata de una concentración de masa que genera una fuerza de gravedad de tal magnitud, que en su radio de acción siquiera la luz puede evitar ser absorbida. Lo más complejo resulta tener que pensar que esta acción de fuerza gravitatoria inimaginable deforma el espacio y el tiempo, generando un asombroso intercambio de papeles entre ellos, a tal punto de desactivar las leyes de la física con las cuales vivimos a diario. Es entonces cuando el tiempo y el espacio dejan de ser rectos, transformándose en curvos, cada vez mas curvos, hasta llegar a ser infinitamente curvos.

Aquí, siendo ya poco lo que se comprende, es cuando aparece el concepto de una realidad que ya no es una, dado que mientras los cuerpos absorbidos por el agujero negro se convierten en cenizas y son irradiados hacia el exterior, los mismos cuerpos permanecen a su vez suspendidos, quietos, sin la existencia de espacio a su alrededor, sin la contención de un tiempo que camine en forma lineal, la forma en que podemos comprender el paso del tiempo en nuestra sencilla vida terráquea.
Y fue en ocasión de leer estas líneas cuando pensé en nuestro abatido país; pensé en la masa concentrada que resulta ser el Estado Nacional, un Estado que todo lo devora, que todo toma para transformarlo en cenizas sin producir beneficio alguno al conjunto de la sociedad. Luego pensé en la visión contraria de la doble realidad del agujero negro, una visión en la cual todo permanece estático, sano, sin movimiento, sin espacio ni tiempo, sin consecuencias, sin evolución ni involución, un estado en el cual no existe prisa ni apuro, un estado en el cual vi suspendidos y sonrientes a la mayoría de nuestros funcionarios de gobierno. Ellos creen que no hay apuro, que nada malo acontece, que los problemas de los argentinos son solo una imagen distorsionada de la realidad, que son el error generado a causa de la relatividad de la visión. Ellos creen que el país no se desintegra, que el fuego no se lo devora al país junto a su pueblo, que todo puede esperar….que la vida es linda y la felicidad infinita.
Luego recordé la conversación que había mantenido con un amigo de la vida que es economista. En esa charla profesional anual, yo siempre le pregunto acerca de cómo son realmente las cosas; que hay debajo de la realidad que vemos o creemos ver; que se espera para el nuevo año que transitamos, un año en el cual nuevamente nos empeñaremos a fondo para lograr sobrevivir, luchando contra quien sabe que nueva loca idea de la casta política que nos desgobierna; luchando contra un nuevo impuesto o el aumento de alguno de los ya existentes.
Y… a que actividad le está yendo bien? Consulte. La respuesta en esta ocasión fue una de las más sorprendentes que yo pueda recordar. El me dijo: “en términos generales le está yendo bien al que vendió todo, pago los impuestos para llevar su capital afuera del país, se mudo con su esposa e hijos menores, y se puso a desarrollar algún pequeño negocio o actividad en un país que cobrara impuestos sensatos y estables, en un país que lo recibiría con entusiasmo y especial atención, (recordemos que en Uruguay quien se muda con sus capital para generar alguna actividad productiva, durante los 10 primeros años no paga impuestos).
Esto es así, me decía ante mi cara de sorpresa. Estas personas pasados seis meses de haberse radicado en el nuevo país dejan de tributar en Argentina, razón por la cual ya no pagaran bienes personales en el porcentaje confiscatorio que ha impuesto este gobierno. Ellos evitaran de esta manera el tener que entregar el 50% de su patrimonio a través del pago del abusivo impuesto durante 30 años.
Luego, como algo anecdótico, mi amigo economista me comento: “para quien se queda con el capital en el país, yo le diría que es un buen momento para construir, dado que el metro cuadrado hoy resulta económico para quien tiene algún ahorro sustancioso en dólares. La inversión es sencilla: compras un terreno, construir una casa y listo….el capital queda asegurado hasta la llegada de la nueva cresta de la ola que en algunos años producirá el péndulo de la decadencia Argentina.
Entonces manifesté: el paso siguiente entonces ha de ser vender la casa y sacar una buena diferencia?
El economista hizo una mueca y me respondió: no, quien construye hoy no puede pensar en vender, en los tiempos que corren difícilmente se pueda vender la propiedad. Es muy probable que el constructor deba esperar que la economía se recupere, comenzando entre tanto a pagar impuestos por esa nueva propiedad.
Bueno, durante un tiempo podría poner la propiedad en alquiler, no es así?
Con un gesto de disculpa y dolor el economista respondió: no creo….con esta ley de alquileres…no creo.
No puedo creer lo que me contas. Entonces, la gente que puede, vende todo y se va? De cuanta gente me estás hablando, le pregunté. ¿Cuántos son los que estan transitando el camino del exilio socio económico?
El respondió: Muchos, son muchos; son los pudiendo juntar algo más de 300.000 dólares y se animan a hacerlo. Es la clase media y la media – alta. Ellos vende su negocio o planta de producción a precio de remate o mediante el pago de cuotas durante muchos años. Ellos venden todo, sus casas, autos y todo lo que poseen para partir hacia el lugar elegido, ese país en donde sueñan poder vivir seguros, un país en el cual no los asalten por las calles, ese país en donde no les roben desde el mismisimo gobierno nacional. Estas personas son en gran medida los que blanquearon capital en la época de Macri…te acordas? Resulta que de cada 10 de mis clientes que poseían capital no declarado, nueve decidieron blanquear. Ellos son los que hoy pegan su cabeza contra la pared. Sucede que el plan de reducción progresiva del impuesto a los bienes personales hasta llegar al porcentaje que cobran los países lógicos ha desaparecido por mandato de este gobierno!! Ahora a ellos el impuesto les sacará la mitad de su patrimonio en 28/30 años a través de la aplicación de este robo disfrazado de impuesto.
“Como pudieron volver a confiar”? Eso dice el rebelde que no blanqueo. El me decía en ese momento: “nooo, yo ni loco traigo o pongo la plata a la vista en mi país….aquí tarde o temprano te roban el dinero; aquí te lo congelan, te cambian el color de la moneda, te la devuelven cuando quieren, en cuotas y con la quita que les venga bien, una quita directamente vinculada a la plata que le falte al Estado para seguir con el despilfarro populista pobrista ordenado por la agenda 2030, y sus files complices.
La conversación me aturdió. Esta vez sentí que me llevaba de la charla una aplastante conclusión: no debía tomar nuevos empleados y tenía que restringir todo los que fuera posible los gastos vinculados a la producción y gestión.
Pensé entonces: se están yendo los que poseen capital, los que generan trabajo….finalmente quedará solo el Estado con algunas de sus empresas sospechosamente amigas…las empresas que se seguirán sumando a los cuadernos de la corrupción.
Finalmente me puse en marcha hacia la oficina, en tanto recordaba que en Exaltación de la Cruz habían subido el impuesto Municipal en forma exorbitante y por fuera del mecanismo legal que le da legitimidad. Me dio mucha pena y bronca. Puse música en la radio y arranque diciéndome en voz alta: así son, así proceden, de pichones llegan a la política con el mismo oscuro ADN cargado de ilegalidad y abuso.
Son los amigos del pase sanitario y de la Pena de Muerte del argentino en gestación. Entonces, que otra cosa podía yo esperar?
Fabián E Sotelo
31 de Enero 2022.