El Ministerio de Hacienda y Finanzas bonaerense ultima los detalles del presupuesto 2023 que enviarían a la Legislatura provincial a fines de este mes, para que sea debatido y se termine de darle forma a la Ley de Leyes. Luego de la presentación, el ministro Pablo López y otros miembros del gabinete harán una exposición ante las comisiones pertinentes.

Como es habitual, los números finales cerrarán una vez que esté aprobado el presupuesto nacional, que ya se discute en el Congreso, ya que del mismo dependen ciertos fondos que afectan a la Provincia. Al respecto, hay optimismo en el Frente de Todos con que se consigan los votos necesarios y no vuelva a ocurrir lo mismo que el año pasado, cuando la oposición rechazó la Ley de Leyes.

El Frente de Todos espera el Presupuesto de Kicillof para mitad de mes con ronda de ministros incluida
En cuanto a la hoja de ruta provincial, y según pudo confirmar INFOCIELO, abarcará los mismos ejes que el que se encuentra en vigencia: una fuerte inversión en obra pública e infraestructura para motorizar la economía provincial y avanzar en proyectos que además permitan mostrar gestión en un año electoral; y otra importante en producción para generar y sostener los niveles de empleo y actividad económica en medio de la crisis.

Amén de comenzar con nuevos proyectos -como el postergado Canal Magdalena que comenzará a trabajar la Provincia en coordinación con Nación-, “hay muchas obras en curso y la idea es enfocarse en terminarlas”, según confió a este medio una alta fuente del Gobierno provincial en relación al camino que tomará la gestión de Axel Kicillof para su último ejercicio antes de las elecciones.

En ese contexto, hay un rubro que atraviesa tanto la infraestructura como la producción: Las rutas. Hacia allí apunta la gestión provincial, que tiene tramos en ejecución en casi todos los caminos productivos. La ruta 6, la ruta 11 y la ruta del cereal son tres ejemplos de lo que el Gobierno quiere completar el próximo año.

Respecto al monto total del presupuesto, aún es temprano para hablar de cifras. La única certeza es que estará por encima de los 4 billones de pesos, de los cuales el 8% estarán destinados a gastos de capital, lo que será un incremento del 1% respecto al presupuesto 2022. La inflación es una de las incógnitas que complejizan el armado final de las partidas, pero desde Hacienda hay tranquilidad y señalan que los números que proyectó Sergio Massa “son sinceros”, y se plegarán a ellos.

Presupuesto 2023: El CUD por ahora no cambia, ¿y el FIM?
Una de las mayores tensiones en el recinto sin dudas será el reparto de los fondos provinciales a los municipios a partir del Coeficiente Único de Distribución (CUD). Como contó a INFOCIELO un intendente PRO, en la oposición se tomarán más tiempo para analizarlo y pedirán “que nos expliciten las variables de su formación”. Es que el reparto de fondos para obras fue este año uno de los grandes conflictos de los jefes comunales de la oposición, y algunos no tienen en claro de qué manera se compone la "fórmula mágica" para decidir las porciones.

En el Ministerio de Hacienda que conduce Pablo López, sin embargo, no tienen previstos grandes cambios y la intención de la gestión provincial es mantener la fórmula del CUD con la que año a año se calcula el reparto de fondos de la recaudación provincial que se coparticipa a los municipios. Una de las diferencias será que habrá “premios” por cumplir con los objetivos fijados en prestaciones de salud.

Otro de los temas a definir es el Fondo de Infraestructura Municipal (FIM), una herramienta creada para articular entre Provincia y Municipios la financiación de obras necesarias para cada distrito, tan útil que año a año los intendentes reclaman su renovación y actualización sin distinción de colores políticos: lo piden tanto los mandatarios locales del Frente de Todos como los de la Unión Cívica Radical y el PRO.

En principio, Hacienda no incluirá el FIM 2023 en el borrador que gire a las comisiones. López, en cambio, dejará a cargo de los jefes de bloque la rosca política sobre el anexo, y al jefe de Gabinete, Martín Insaurralde, el hombre señalado por Axel Kicillof para llevar adelante los diálogos con con los intendentes. Se espera que, como en los últimos dos años, el FIM sea el moño con el que se ate el presupuesto 2023.

Un asterisco es la crítica de los intendentes para con el Gobernador por la falta de celeridad en la ejecución de las obras. Según denuncian, los fondos para realizar las obras se demoran más de lo previsto y, por ende, se los "come" la inflación. "Presupuestamos diez cuadras de pavimento y finalmente podemos hacer seis", reclamó abiertamente el intendente de La Plata, Julio Garro, quien señaló que "los que salen perjudicados son los vecinos que reciben cuatro cuadras menos, no los intendentes".

En Provincia se defienden al señalar que el problema yace en la alta demanda de contratistas. "Hay mucha obra pública en marcha, y las constructoras no dan abasto. Por eso se frenan varias obras", apuntó un Ministro a INFOCIELO. También señalan que hay una burocracia inevitable antes de llevar a cabo los desembolsos, como son las licitaciones. Cuestiones de transparecia. Hay allí un gran punto en discusión: cómo quitar papeleríos y lograr mayor celeridad entre la firma de los convenios y la ejecución de la obra sin afectar los procesos legales. Otra opción sería implementar cláusulas gatillo como ocurre con las paritarias, pero la misma no cuenta por el momento con la aceptaciónd de Kicillof.